AMAR ES CUIDAR
- Bambu Emociones
- 26 oct 2020
- 2 Min. de lectura
Amar es cuidar. Es simple, no hay amor que se base en el descuido. De tal manera, cuando uno ama a alguien el pensamiento relacionado con eso no es más que EL PODER CUIDAR al otro. Esto se mantiene con pequeños detalles, como el escuchar, acompañar, ayudar, valorar su compañía y hacerle sentir a ese SER único, irremplazable, especial, mimado y amado.
Sin embargo, cuando tenemos que poner en acción esta costumbre del cuidado diario hacia el otro, para demostrarle nuestro amor, solemos pecar de desinterés y acabamos por dañar nuestra relación con actitudes de indiferencia o, de postergación de los detalles.
Amar es cuidar y regar el amor todos los días, para que este no se marchite y no termine secándose como una plantita sin riego.
Puede parecernos muy obvio, pero la realidad es que lo primero que solemos abandonar es precisamente eso: el cuidado. Conocemos a la perfección la teoría, pero nos cuesta llevarlo a la práctica.
El amor solo dura mientras lo cuidas y lo cuidas tanto como lo quieres y este te interese, y nunca mejor aquella frase que aplica cuando se descuida y es “no sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos”.
Si no somos responsables en cuidar de nuestras relaciones nos arriesgamos a perderla. Cuando AMAMOS cuidamos ese vínculo con ese otro que elegimos, porque sentimos que nos hace felices.
Cuando cuidamos al otro, tenemos que tener en cuenta tanto las necesidades nuestras como las del otro. Pero las necesidades del otro deben ser tomadas en serio...
El amor florece con los detalles pequeños, lo sencillo siempre es más importante. El disfrutar pasar el tiempo juntos, las sonrisas espontáneas, las selfies improvisadas que plasman ese momento y te hacen sonreír cada vez que las ves, ese alfajor, esa merienda, ese desayuno sorpresa. Esas cositas que nadie más conoce y se vuelven tus favoritos, y los convierte en cómplices, esos susurros, esos mimos… ese estar cuando el otro necesita aun sin que nos lo pidan. Eso es lo que verdaderamente vale la pena; las cosas diminutas que causan emociones gigantescas e inolvidables. De hecho, la vida no es más que una sucesión de recuerdos de emociones y momentos inolvidables. Hasta prontito!!

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